Que los suelos de madera son, con diferencia, los que aportan más calidez y elegancia a una vivienda es algo que no admite discusión. 

Es un material bonito, versátil, luminoso… Además, combina con todos los estilos decorativos que pueda tener un inmueble, ya sea un estilo más rústico o uno más moderno y minimalista. Por todo ello, es la gran elegida a la hora de seleccionar el suelo de cualquier estancia.

Pero ahora llegamos a otra cuestión importante: su limpieza. Tanto si estamos ante suelos de madera maciza como de suelos de parquet o de tarima laminada es necesario cuidarlos siguiendo estos consejos que hoy vamos a compartir contigo en este post.

Trucos infalibles para limpiar los suelos de madera y similares.

1.- Productos específicos

Lo primero que debes tener claro es que no puedes usar el mismo producto para limpiar el suelo de baldosas de la cocina y el suelo de madera de otras estancias. Cada suelo necesita su producto específico. Y aunque, probablemente, no pase nada si limpias el suelo de tu cocina o de tu baño con un limpiador de madera, si lo haces al revés corres el riesgo de estropear la madera al tratarse de limpiadores demasiado agresivos para ella.

2.- Fuera fregona

El agua y la humedad son grandes enemigas de la madera. Por lo tanto, olvídate de utilizar la fregona que pasas por otros suelos. Por mucho que la escurras a conciencia, una fregona contiene una humedad que no haría más que perjudicar a tu suelo de madera.

¿Qué utilizar entonces? Pues existen unas mopas especiales que son como una especie de fregonas pero con tiras de bayeta para limpiar en seco que resultan perfectas para aplicar el limpiador específico que hayas comprado para limpiar tus suelos de madera o similar.

3.- Encera de vez en cuando

Barrer, pasar la mopa para quitar polvo acumulado y limpiar con un producto específico está muy bien. Pero los suelos de madera requieren un encerado ocasional para que luzcan brillantes y con todo su esplendor. 

No debes olvidar que la madera necesita hidratación, a pesar de lo que te hemos dicho del agua y la humedad. Y la manera de hidratar interiormente la madera es mediante la aplicación de cera. Para ello, tendrás que comprar una cera adecuada a tu tipo de suelo de madera y aplicarla bien con un paño o bien con una mopa para que se extienda de manera uniforme por toda la superficie.

4.- Tratamientos de otro nivel

Hay algunos suelos de madera que ya sea por el propio material o por el uso y tránsito que tienen, pueden llevar tratamientos específicos de otro nivel. Nos estamos refiriendo a tratamientos ignífugos, tratamientos antihumedad, tratamientos antideslizantes e incluso tratamientos antiestáticos para eliminar las cargas de la electricidad estática del suelo. 

Como ves, estamos hablando de un cuidado de otro nivel, muy orientado a conservar estos suelos en condiciones excelentes en el tiempo.

Al margen de estos trucos, queremos recordarte que, como ocurre con los cuartos de baño, el verdadero truco para que los suelos de madera estén siempre perfectos es limpiarlos a menudo aunque sea de manera más liviana. No olvides que el polvo y la suciedad diaria pueden terminar rayando la madera, de ahí que sea importante que al menos los barras y les pases una mopa tres veces a la semana.  Al margen de esta limpieza, debes realizar una más intensa con productos específicos que puedes realizar una vez a la semana o cada 10 días y el encerado que ya es una tarea más ocasional.

Y para finalizar, ojo con las patas de los muebles. Procura usar tapas protectoras de fieltro o coloca alfombras estratégicamente para que no se produzcan rayones en el suelo. Y si tienes animales domésticos, más de lo mismo: procura cortarles bien las uñas y ten cuidado con que no arañen o rasquen tu suelo de madera.