Hace unos meses te hablamos de los deportes perfectos para la primavera y ahora que el calor va aumentando, queremos recomendarte los mejores deportes para verano. Si en primavera nos preparábamos para iniciarnos en deportes al aire libre y de baja intensidad, en verano aprovecharemos el buen tiempo para mantenernos en forma mientras disfrutamos de la naturaleza.

Trabajar la musculatura, mantener activo nuestro cuerpo y obtener nuestras dosis diarias de vitamina C son algunos de los beneficios de practicar deporte en estos meses. Lo que no debemos olvidar nunca es utilizar protector solar. Existen un montón de opciones en el mercado que están específicamente diseñadas para resistir al sudor y no resultar pegajosas ni incómodas cuando estamos haciendo ejercicio.

¿Cuáles son los mejores deportes para verano?

En realidad, casi cualquier deporte puede continuar practicándose independientemente de la estación del año en la que nos encontremos. Deportes específicos de invierno como esquí o patinaje sobre hielo no serán posibles más que en pistas artificiales o si viajamos a otras zonas del planeta donde haga frío.

Vóley playa

Todo un clásico de los deportes de verano es el vóley playa. No necesitamos más material que una pelota, pues en la mayoría de playas hay redes y, si no, podemos simplemente imaginar el límite que ocuparía en caso de no haberla. Podemos jugar en bañador, en pantalones cortos, no necesitamos equipación específica. Es un ejercicio muy completo en el que trabajamos casi todo nuestro cuerpo y la parte aeróbica.

Calistenia

Uno de los ejercicios más de moda actualmente. Lo has visto en redes sociales, en las revistas, en televisión. Hay varias modalidades y formas de practicarlo pero una de las más habituales y beneficiosas es al aire libre. Muchos parques cuentan con instalaciones específicas, pero cualquier banco o columna puede servirnos como gimnasio improvisado. En este método de entrenamiento se utiliza el peso del cuerpo como resistencia para trabajar la fuerza y la capacidad cardiovascular.

Remo

En el río, en un lago, un embalse, la playa… Existen numerosos lugares donde poder practicarlo. Si no dispones del material necesario y la logística para su transporte, puedes buscar espacios donde alquilarlo. Es muy común encontrar empresas de turismo de aventura que ofrecen este tipo de servicios. Con este tipo de ejercicio trabajamos todo el cuerpo, en especial el tren superior. Si además te gusta la competición, puedes animarte a participar en alguna.

Natación

El clásico del verano por excelencia. Piscinas al aire libre y playas son el escenario ideal, más sencillo y más barato para ponernos en forma cuando calienta el sol. No necesitamos más que nuestro bañador, quizá un gorro en el caso de las piscinas, y precaución en el caso del mar. El agua ofrece resistencia y trabajamos todo nuestro cuerpo. Además es beneficioso para la espalda, nuestros huesos y articulaciones, tonificamos y ganamos masa muscular. Es ideal para problemas de rodillas o espalda. Insistimos en este caso en seguir las recomendaciones del personal de socorrismo, conocer bien el medio en el que nadamos y jamás ponernos en peligro si no estamos seguros de que las condiciones sean las óptimas. Si tenemos eso en cuenta, nadar será todo un placer.

Senderismo

Uno de los deportes más sociales que existen, aunque haya quienes lo practican en solitario. Si no tienes un grupo de amigos con el que ir, puedes apuntarte a algún club de montaña o excursión organizada y además de ponerte en forma, conocerás gente. Lo más importante para este deporte es llevar un buen calzado, los calcetines adecuados y protegerse bien del sol. Gorras, sombreros y protección solar son imprescindibles. Puesto que el tiempo en la montaña puede cambiar repentinamente, también te recomendamos llevar un cortavientos o plumas plegables en tu mochila. ¡Y agua! Mantente siempre hidratado.

Correr

El deporte más popular y puede que uno de los más económicos y versátiles. No importa donde estés, solo tienes que calzar tus zapatillas y salir a la calle. Por supuesto, existe ropa técnica especialmente diseñada para correr, pero si no lo haces de forma regular, seguro que puedes adaptar tu ropa más deportiva a esta práctica. Activarás tu metabolismo, aumentarás la circulación sanguínea y el trabajo pulmonar.

Ahora que ya dispones de unas cuantas recomendaciones de deportes de verano entre las que elegir, ¿por cuál de ellas vas a decidirte?